VELASCO COELLO APUESTA AL ESTADO POLICIACO

VELASCO COELLO APUESTA AL ESTADO POLICIACO. 

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, CONTRA PODER .- El día de 8 de Mayo se presentaron al Congreso Local distintos proyectos de iniciativa de ley en donde sobresale el “Código que establece el uso legítimo de la fuerza por las instituciones de seguridad pública del Estado de Chiapas”, así como el “Decreto por el que se reforma el inciso A del párrafo sexto del Artículo 269 Bis A del Código de Procedimientos Penales en el Estado de Chiapas”, mismos que por la instrucción de la Presidencia del Congreso fueron turnados a comisiones para su estudio y dictaminación.

 

En el proyecto de Código que establece el uso legítimo de la fuerza se considera que compete a las autoridades estatales y municipales en materia de seguridad pública su aplicación. En el artículo 8 de este código se contempla el uso de armas incapacitantes no letales, a fin de reducir o controlar la resistencia activa de una persona. Pero a la vez, se contempla el uso de armas de fuego o letales, a efecto de reducir o repeler una resistencia activa agravada de una persona. Esta disposición, en caso de aprobarse, pone en riesgo a la ciudadanía frente a los actos arbitrarios de los cuerpos policíacos, que se caracterizan por erl abuso de poder y por su ignorancia. Pero, de igual manera, se autoriza el uso de las armas a las policías municipales, que de acuerdo con la ley, su función es sólo de carácter preventivo del delito, convirtiéndolas en un plumazo en cuerpos coactivos, pasando por alto, que en todos los municipios del estado hay policías municipales que son analfabetas, lo que los convierte en una amenaza real a los derechos humanos de los chiapanecos.

Esta iniciativa de ley resulta inentendible, cuando hace seis días el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas presentó al Relator Especial de las Naciones Unidas sobre la cuestión de la Tortura 18 casos de tortura en Chiapas; en dos  de estos casos los detenidos murieron presumiblemente por los golpes recibidos por la policía. En esa presentación el Frayba señaló que la tortura es un castigo ejemplar para desalentar la denuncia, la participación de los movimientos sociales y las críticas al gobierno. 

La presentación del Código que establece el uso legítimo de la fuerza está acompañada por el decreto de modificación del código de procedimientos penales en donde se califican como delitos graves la sedición, motín y conspiración, previstos en los artículos 352, 353 y 354. La aprobación de estas disposiciones representan una amenaza a los derechos humanos y son una medida regresiva que se contraponen al espíritu del Artículo primero de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos.

Estas disposiciones resultan peligrosas para la convivencia y son inexplicables viniendo de un gobierno encabezado por el gobernador más joven del país, que toma medidas retrógadas y atentatorias a los derechos humanos de los chiapanecos. No hay duda que estas disposiciones van a ser aprobadas por el Congreso, que no representa los intereses ciudadanos y que vergonzosamente se han convertido en un apéndice del poder ejecutivo. Pero también se hace explícito la separación que hay entre el gobierno de Manuel Velasco Coello con la ciudadanía, pues con estas iniciativas muestra su verdadera cara de autoritarismo y apuesta a un gobierno represor y policíaco.

Frente a estos actos de aprobación de leyes regresivas que afectan a las libertades y a los derechos humanos, el único camino de defensa es la Suprema Corte de Justicia por la vía del amparo.